Abrazo mis moches buscando tus noches.
Mis ojos vidriosos te buscan en el fondo de la nada.
No te puedo encontrar.
Vuelvo a soñar que me vuelvas amar.
Mis manos cansadas buscan tu ausencia.
El aire me susurra que ya no estás; que no volverás.
Mi alma rota en pedazos pequeños te anhela.
Mi mente destroza tus recuerdos. Pronto volverán.
Ya, no eres mía,
ya no te tengo.
Grito a mi propio silencio y me devuelve el eco de tu voz.
Riego las sabanas con mis lágrimas.
Quizá brote un nuevo mañana,
quizás en otra vida te deje de querer.
Mis oídos sangran tus últimas palabras.
Quemo mi angustia empapada en alcohol.
Intento odiarte; no puedo; no sé.
Te amo; simplemente eso.
Bajo la lluvia me fumo mi última esperanza;
te he vuelto a ver.
Ahora entiendo lo que es la fé.
Autor. Raúl Álvarez Quiñones.